Opción 1
Saca del congelador tu platillo, colócalo en una olla a baño maría hasta que se haya descongelado por completo. Después termina de calentarlo en la estufa.
¡A darle que es mole de olla!
Opción 2
Saca tu platillo del congelador, ábrelo y colócalo en el horno de microondas durante 3 minutos. Termínalo de descongelar y calíentalo en la estufa.
¡A comer se ha dicho!
Opción 3
De preferencia saca tu platillo del congelador y colocalo en el refrigerador 24hrs antes de consumirlo. Después colócalo en la estufa hasta que quede calientito.
¡Es hora de comer!
Opción 4
Saca del congelador tu platillo, ábrelo y colócalo al horno de microondas en lal función de descongelar. Continúa el proceso con el mismo método hasta que quede listo para que lo disfrutes.
¡Buen provecho!